Una vez que parece que los terribles incendios forestales comienzan a darnos algo de tregua tras unas semanas trágicas, resulta vergonzoso comprobar de nuevo como nuestros gobernantes se olvidan de solucionar nuestros problemas para concentrarse en el marketing electoral ofendiendo la inteligencia de todos los españoles.
Pedro Sánchez, en reciente rueda de prensa tras 225.000 hectáreas calcinadas sin control en todo el país, exige a la oposición no utilizar políticamente estos incendios culpando únicamente al cambio climático, ese que personalmente no combate mucho, cuando la reciente hemeroteca nos recuerda que su jefe de gabinete, Felix Bolaños, en el mes de julio acusaba a las comunidades del PP de ser responsables subsidiarios de los incendios por su pésima gestión en la prevención, comparándolas además con las eficientes regiones socialistas, que por cierto al poco de hablar Bolaños también ardieron sin control.
Olvida también el Presidente que él mismo en 2012 y 2017, acusaba a Rajoy incesantemente de recortar los recursos forestales motivo de los posteriores incendios de esos años padecidos en nuestro país. Una vez más tragedias arrojadizas para desgastar al oponente, pero soluciones al problema…ninguna.
Con un verano abrasador como nunca hemos vivido y una terrible sequía hasta en las comunidades tradicionalmente húmedas, creo yo que sí que habría sido fundamental decretar el estado de emergencia para enviar a nuestros montes a los militares hacinados y aburridos en los cuarteles, para apoyar a sus compañeros de la UME realizando labores de ayuda, vigilancia y control en los accesos y carreteras ahuyentando a pirómanos y campistas inconscientes.
También como ejemplo se posibles acciones se podrían haber creado brigadas forestales remuneradas, formadas por temporeros, desempleados y hasta presos voluntarios a cambio de reducciones de condena, para desbrozar con carácter de urgencia las zonas antes olvidadas por los gobiernos autonómicos que entiendo no contaban con olas de calor de más de 40 grados.
Sin embargo lo importante este verano era perseguir y multar, ahora sí por decreto oficial, a los empresarios que no acataran reducir el frío en sus locales.
Necesitamos de una vez un acuerdo político nacional de acondicionamiento de nuestros montes y un refuerzo indefinido en los meses de más calor…aunque me temo que Pedro Sánchez, que no reconoce carencias gubernamentales en su gestión de prevención de incendios, esperará a que Feijóo recorte recursos forestales porque como todo el mundo sabe con el PP, el cambio climático no afecta para los incendios.
Una vez más, ¡¡Lamentable!!
Manuel Abad García.
Director Grupo Megahertzios